Ruido blanco es un libro de poesía sobre la infancia en dictadura, las imágenes de
la memoria que se van develando en el paso del tiempo, y que marcan las
acciones de la juventud. El trauma de la violencia, las consecuencias de la
inflación, la pobreza de los barrios activos políticamente, el temor a desaparecer
no solo de una familia, sino de un país completo es de lo que habla este libro. La
mirada desde la niñez frente a los últimos nueve años del golpe militar que fracturó
las vidas de millones de personas, la incertidumbre, el olor de la muerte
circundante y las formas en que se ocultaba para mantener una tranquilidad que
nunca llegó a ser cierta para la mayor parte de la población.
Mi abuelo nos contaba en las vacaciones que durante el golpe militar, al irse de la
imprenta del Congreso, que estaba en el subterráneo, no comprendió el paisaje que
veía
No había vereda, o calle, el suelo era un mosaico de muertos,
puestos en diversas posiciones como un rompecabezas de coágulos,
vísceras, manos atados a la espalda, piernas sobre piernas.
Dice que se acordó de cuando era niño y trabajaba como cargador
y limpiador en el matadero de Franklin.