Los modelos de pensamiento que parten de la violencia como la primera y última de las cosas y la colocan en un plan metafísico tienen su origen en la antigüedad (la guerra como "padre de todas las cosas") y llegan hasta el presente (la guerra como "último recurso"). En consecuencia, el pensamiento pacifista occidental se ha visto enfrentado al problema de poner fin a la vilencia sin recurrir a una "nueva" metafísica a su vez violenta. Partiendo del pensamiento antimetafísico representado por gianni Vattimo, el libro ofrece un análisis de la interpretación emancipadora que hace Vattimo de Heidegger y de Nietzsche, seguido por un estudio de las implicaciones pacifistas de las contribuciones de Vattimo en diferentes campos de la filosofía teórica y práctica. De tal manera se esbozan los rasgos de un pensamiento pacifista "débil" propio de la época en que la metafsica llega a su cumplimiento en el mundo de la tecnociencia (el "Ge-stell" de Heidegger), que favorece un pacifismo estético y negativo más allá de las posiciones positivistas y derrotistas.