Este libro es una llamada, pero ante todo un homenaje, a dos de las más grandes voces femeninas del siglo XX: Clarice Lispector y María Zambrano. La lectura de este texto es un ejercicio de reconocimiento de semejanzas simbólicas, sentidos, sensaciones, emociones, pulsaciones, latidos, en donde se destaca en las dos protagonistas el contenido genético de sus producciones.