Un hermoso jardín en Toscana: una pasión, un aprendizaje, un lugar de resistencia. Un día, la escritora descubre que una enfermedad incurable se la lleva poco a poco. Ante la degradación de su cuerpo, constreñido paulatinamente a la inmovilidad de una planta, el jardín, ese lugar donde la vida germina y donde las «resurrecciones» se suceden, se convierte en su refugio. Un libro que, como muy pocos, nos ayuda a comprender la fascinante aventura de estar en el mundo.