¿Qué hilos pueden unir a una escritora latinoamericana contemporánea con un filósofo francés del siglo XVI? Cuando la mexicana Isabel Zapata se cruza con los famosos Ensayos de Montaigne, entiende que tiene entre manos un nuevo proyecto. Montaigne es un clásico. Y un clásico se construye como algo inalcanzable, cerrado, de un consenso inapelable. Isabel decide entrar en conversación con esa figura, volver a leerla, encontrar su humor, sus aristas y entablar un cruce poético que atraviesa los siglos. Decide, en resumen, devolverle la vida, algo que para cualquier escritor, de cualquier siglo, significa encontrar con quién dialogar.