El 19 de julio de 1922 arribó al puerto de Veracruz Gabriela Mistral, una hasta entonces desconocida profesora y poeta chilena de 33 años. La historia de aquella mujer en tierras mexicanas es la de una relación simbiótica compleja y apasionante en la que, al tiempo que ella se labraba un nombre literario y un prestigio intelectual, colaboraba activamente en la construcción del proyecto educativo del secretario de Educación Pública, José Vasconcelos, y en la difusión continental de los afanes ?latinoamericanistas? del presidente Alvaro Obregón.