Físicamente, la violencia se concretiza en quiebre, ruptura, irrupción. Más allá de lo material, altera incluso el devenir del tiempo. Quisiéramos que fuera distinto. Como dice Marisol García Walls: «Hubiera querido decir: esta no es mi historia. Pero ni modo. Me tocó contarla». Comparecencia (in)voluntaria combina el texto ensayístico y la intervención visual para hablar de dos violencias: la que se ejerce sobre el cuerpo y la burocrática, que además de revictimizar, azota con la garantía de impunidad. García Walls subvierte esta doble crueldad, reapropiándose de la voluntad arrebatada y quitándole a la violencia su poder estructurante. Ante esto, la escritura practicada con la palabra y con el cuerpo se convierte finalmente en una forma «otra» de hacer justicia. «Leamos entonces este libro como una invitación a dudar de los relatos que nos construyen en estos contextos y momentos de violencias varias, sistémicas, criminales, silenciosas, sádicas. En esa duda, en ese extrañamiento, podremos encontrar nuestra palabra» Daniela Rea «Al leer este libro nos convertimos en testigos de un acto de alquimia. Lo que veremos ocurrir aquí es la trasfiguración y metamorfosis del dolor en testimonio libre y voluntario: un acto de transmutación» Marina Azahua